Buenos días!!! Este post es para que podamos conocer más de cerca a los cuencos tibetanos, para saber un poquito más de estos cuencos sanadores.
Empezaré comentando que me encantaban y esperaba el momento me compré uno de estos cuencos, elegí uno y estoy completamente encantada, es precioso, pequeño pero con una fuerza y vibración increíble. Estoy fascinada.
Estos cuencos se llaman así porque la mayoría son fabricados en esa zona del Tibet, los Himalayas, China, Tailandia y Japón, están formados por la aleación de siete metales: oro, plata, mercurio, estaño, plomo, hierro y cobre, y se forjan de manera artesanal. Llegan a pesar entre 150gramos hasta varios kilos, elegirlo depende de tu intuición y de la vibración que se obtenga al golpear o frotar con su baqueta.
Beneficios: Se utilizan para la curación, relajación y la meditación porque producen sonidos armónicos que invitan a la paz, el bienestar y serenidad.
- Ayudan a equilibrar nuestros centros energéticos liberando ira, estrés, ansiedad, tristeza, etc. llevándonos hacia un estado de paz y relajación ya que eleva nuestra frecuencia vibratoria y aumenta nuestra energía corporal.
- Alivio de estrés, ansiedad, sinusitis y dolores de cabeza.
- Mejora de la concentración, la creatividad y la visión (física, mental y espiritual).
- Equilibrio de los hemisferios cerebrales.
- Restablecimiento del equilibrio del sistema endocrino mediante la vibración de la hipófisis o pituitaria.
- Estímulo de la actividad de las ondas alfa o meditación profunda.
- Equilibrio y limpieza de los chakras y del aura (y los órganos y glándulas correspondientes).
- Limpieza del entorno, casas.
- Fácil acceso a la intuición y a la conciencia superiores.
- Desbloqueos emocionales y energéticos.
- Actúa como fuente de energía para todo el cuerpo. Afloja y libera tensiones musculares. Expande e intensifica el cuerpo áurico, que actúa como defensa energética.
- Aumenta en general las defensas del organismo y brinda paz interior. Trabaja sobre el equilibrio entre ambos hemisferios cerebrales, resultando ideal para personas muy racionales o con estrés mental.
- Su práctica regular ayuda a la reafirmación personal y favorece una mejor relación con el entorno.
- Ayuda en casos de insomnio e hiperactividad.
Los cambios que se perciben son mayor claridad mental, visión de futuro, mayor productividad, equilibrio y paz consigo mismo. Sus sonidos nos ayudan a conectar con nuestra verdadera esencia, conciencia o yo superior donde encontramos paz y amor.
Cada vez se los puede encontrar más fácilmente, en centros de meditación, yoga y en tiendas de música.
El poder sanador del sonido trata problemas de salud como depresión y autismo entre otros, se está demostrando que el sonido tiene efectos positivos en nuestro cuerpo, se utilizan cada vez más con fines terapéuticos.
El sonido es un código universal, tiene un “idioma” que el cuerpo y la
mente reconoce y entiende cuando lo escucha. Es información para el cuerpo y para la mente. Por eso, cuando el cuerpo escucha los sonidos armónicos, activa en él, por resonancia,
su código armónico interno. Produciendo así los cambios necesarios para el
cuerpo.
Cuando se producen bloqueos el cuerpo deja
de resonar con el universo y con su entorno, porque pierde su sonido original
armónico y aparece entonces la desarmonía del cuerpo. Al aplicar sobre el cuerpo, ya sean los sonidos armónicos de los cuencos, el cuerpo reconoce los sonidos, identificando así, el
sonido armónico que le corresponde para restablecer su equilibrio y armonía
natural.
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